Hoy no voy a hablarles de cómo les fue a las Panteras, perdieron 26-3 y pareciera que no salieron a jugar, los Cargadores ni siquiera se esforzaron mucho. El equipo de casa es una pena… es decir, sin novedad.

Otra cosa que tampoco es novedad es que los Jefes de Kansas City, en lo que fue el partido más entretenido del domingo le ganaron, en el último segundo 26-25 a Cincinnati. Una vez más ayudados por los árbitros luego de jugadas controversiales, pero olvidémonos de las 2 últimas jugadas, tanto la interferencia de pase a un ovoide imposible (o tal vez no?) de atrapar, esta semana, o el talón pisando primero que la punta del pie del ofensivo de los Cuervos la pasada, ambas pudieron ir para un lado o el otro. Hay una consistencia entre las jugadas marcadas a favor de Kansas en ambos partidos, un jalón que los árbitros no ven, un acomodo ilegal que no existía, una interferencia que no se marca, suman, y suman siempre a favor del campeón muy al estilo de lo que sucedía con los Patriotas a principios de siglo. Pareciera que la liga está buscando un nuevo equipo al que todos odien… pero tal vez exagero ¿o nó?

Otras cosas interesantes que notamos en la semana fueron las Vaqueritas haciendo el ridículo en casa ante los Santos. La temporada de Miami irse al caño luego que el mariscal Tua Tagovailoa sufriera una contusión que lo mantendrá fuera varios juegos. Los 49s sentir en serio la ausencia de Christian McCaffrey por lesión ante unos Vikingos que están sorprendiendo y unos Cuervos que siguen con mala suerte caer en Las Vegas donde, a menos que pase algo rarísimo, como sucede cada domingo, como hoy que Arizona aplastó a los Carneros, las Panteritas harán el ridículo el domingo próximo.

Pero apenas es la semana 2, como dijo el entrenador de los Leones Dan Campbell luego de una derrota inesperada contra Tampa, “no vamos a alarmarnos, todavía falta mucho.”

Por Hernán Mena
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