Pues según Hugo que el Ford Field iba a explotar celebrando la victoria de Detroit pero al final explotó en lágrimas porque una vez más los Commanders fueron de visitante a jugarle al tú por tú al favorito, pero esta vez no eran los Bucaneritos sino el sembrado número uno de la Conferencia Americana. El problema de los Leones, además de todas las bajas en su defensiva, es que Jared Goff de vez en cuando da un juego malo, y el domingo tocó una actuación algo irregular con una intercepción para siete puntos rápidos del rival. Cuando la ofensiva de los locales despertó ya iban abajo en el marcador con dobles dígitos y simplemente no pudieron parar a un equipo inspirado que ahora viaja a Filadelfia.

Aquí terminan, como la temporada de los Leones, nuestros pronósticos y Hugo se los lleva, por un poco nada más, un año más:

Decíamos que Jared Goff da un juego malo de vez en cuando y por eso los Carneros se lo cambalachearon a los Leones por Matthew Stafford y así llegaron a ganar el Súper Tazón hace algunos años, pero el domingo contra las Aguilas tampoco pudo hacer que su equipo salga adelante y los dejó en la orilla con un pase incompleto en cuarta oportunidad que selló su suerte. Tampoco le apoyó gran cosa su defensiva que dejó correr como liebre a Saquon Barkley quien tuvo 2 anotaciones y más de 200 yardas por tierra.

De este modo el campeón de la Conferencia Nacional será el ganador de:

Washington en Filadelfia, 3:00 PM, 1/26

Estos dos equipos se conocen bien, se ven las caras, de menos, dos veces al año y ya dividieron victorias. Washington viene motivado, Filadelfia no tiene a Jalen Hurts al 100% y jugó un partido pesado. ¿Será que los Commanders continúen la temporada de la cenicienta hasta el gran baile? Lo sabremos el domingo por la noche.

En la Americana también hubo sufrimiento y llanto, se escuchó desde Búfalo hasta Baltimore el graznido del cuervo moribundo luego de que el siempre confiable ala cerrada Mark Andrews no pudo asegurar el ovoide en la conversión de dos puntos que daría el empate y alargaría el juego. Ambos verbos, como el hubiera, no existen y ahora los Bills enfrentarán a unos Jefes de Kansas que no necesitaron la ayuda de los árbitros, aunque la tuvieron, para superar a unos Texanos que no supieron aprovechar sus oportunidades y gracias a un dominio total de parte de la línea defensiva, que capturó ocho veces a CJ Stroud y una secundaria que se cerró cuando el rival llegaba a zona de peligro ahora Mahomes y llega por séptimo año consecutivo a la final de la conferencia, último partido del año antes del Súper Tazón.

Búfalo en Kansas City, 6:30 PM, 1/26

El único equipo que le ganó a los Jefes en la temporada regular (lo de Denver no cuenta porque estaba la banca jugando) llega a intentar acabar con la ilusión de los actuales campeones. Josh Allen ha levantado a un equipo que, sin grandes estrellas fuera de su mariscal, trabaja en forma ordenada, al estilo de los Patriotas de hace 20 años. Cada día estoy más en el bando de los que creen que los Jefes reciben ayudaditas de los árbitros y que la NFL está interesadísima en un tricampeonato rojillo, pero si hay un equipo esta temporada que merecer llegar a la fiesta grande, y llevárselo todo, son los visitantes, el partido de la temporada regular fue un partidazo y no dudo que este sea otro igual.

Por Hernán Mena
hernanmena@lagambetasportscarolinas.com