Por Hugo López
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Con un buen arranque el el quinteto inicial el equipo de los Hornets comandados por Ball, tenían bien armado su equipo y con una ventaja de 9 puntos en el primer cuarto. Se pensaba que el partido lo iban a tener dominado contra los Bucks de Giannis Antetokounmpo que la verdad estaban jugando sin presión al rival. 

Un LaMello Ball encestando a diestra y siniestra, siendo el mejor encestador en la duela, con 37 puntos al final, pero necesitaba que también los compañeros como Gordon Hayward y Mark Williams que empezaron de titulares apoyaran con los tiros de tres, muy pobre en ese aspecto. 

Con un Miles Bridges que desde la banca aportó 17 puntos. 

Bueno para no hacerla tan larga, el juego al medio tiempo ya estaba a favor de Los Bucks 59 — 57 y Los Hornets aún estaban dando un gran partido. Pero en la segunda da parte los movimientos de jugadores empezó a decaer en el equipo de Ball, a tal grado de que la ventaja se incrementaba a favor de Los Bucks.

Para el último cuarto Brook López, Khris Middleton, Giannis Antetokounmpo y su gran contratación para este nuevo torneo, Damian Lillard aportaron lo suficiente para dejar las cosas 130 a 99 y llevarse un triunfo aplastante. 

Los Hornets no tienen un gran equipo tal vez para competir contra estos grandes como los Bucks, pero sí de locales dan buenos partidos para llevarse los triunfos, pueden contra quien sea, pero lo que vimos es que la banca debe de tener más minutos para que los titulares se recuperen y en el cierre den el extra sin que se apaguen como sucedió ante los Bucks. 

Vamos a ver contra los Knicks esta noche que también es un equipo que anda muy bien.