Esta semana los Charlotte Knights cierran su temporada como locales en una serie contra los Durham Bulls, la cual es probable que pierdan y lo cual aumenta la probabilidad de que terminen en último lugar de su división luego de una temporada para el olvido.

La NBA arranca en poco más de un mes y los Hornets, pese a que se armaron un poco mejor, están en reconstrucción y no espero, supongo los fans tampoco, algo más que al menos un mejor récord que el del año pasado, hablando de años para el olvido.

Las Panteras regresan a casa para el partido inaugural en el Bank Of America luego de caer ante Arizona y la afición está llena de dudas previo al partido inaugural en casa contra los Halcones de Atlanta este domingo.

Todo parece estar de capa caída para la fanaticada, pero sin mucho alboroto, combinando jóvenes con veteranos y ajustando posiciones durante la temporada el entrenador Dean Smith ha hecho del Charlotte FC un cuadro respetable en la MLS. Por fin están en posición de terminar en la parte alta de la tabla lo que les permitiría tener un rival más accesible en los playoffs. En este momento, restando solo cuatro partidos en la temporada regular, están en el tercer sitio de la Conferencia Este y jugando un futbol rápido de ataque por las bandas que genera resultados positivos.

No todo es perfecto, hay detalles que no terminan de convencerme, el once juega demasiado abierto y la defensiva no está coordinada al 100%, provocando que el guardameta Khalina recurra, de menos, a un paradón innecesario cada semana de los que generan el aplauso de la afición, pero no son necesarios. Dicho esto, es bueno saber que al menos hay un equipo levantado el nombre de Charlotte en alto, aunque a algunos les duela que sea el de “Soccer”.

Por Hernán Mena
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