
Estaba comprando boletos para ver a mi Azul aplastar al Charlotte FC en unos meses y de curioso entre a ver los precios de los Eventos Magnos del Futbol Soccer internacional que habrá este verano en la Ciudad Reina y si se nos puisieron los pelos de punta el año pasado con lo que pagó la gente para ver a Messi trotando a medio gas por la media cancha, obligado por el servicio de streaming que paga su sueldo, ahora estamos viviendo situaciones más ridículas aún.
En breve, para la Semifinal de la Copa America, un asiento en gayola, segundo piso, detrás del tiro de esquina, cuesta $260 dólares. Un boleto en la parte de abajo, segundo nivel, detrás del tiro de esquina, cuesta $850, sí, no es un error, $850. Por cierto ese precio súper inflado es porque toda la parte de abajo ya es reventa, pero dudo que el precio original sea mucho menor.
Ambos boletos ni siquiera son en el mejor lugar, ni la mejor vista, en su zona, pero es un precio promedio pensando, como yo lo hago, que lo que importa es vivir la experiencia (luego volveré a lo de vivir la experiencia).
Los precios inflados son debido a la especulación. La lógica dice que en ese partido jugará la Selección de Brasil o Argentina, una experiencia que no se volverá a vivir en Charlotte, pero poder asistir a la experiencia, para una familia de cuatro personas, cuesta más de mil dólares, y eso es sólo para entrar al estadio. (de las palomitas, hot dogs, cervezas y otros no voy a hablar hoy). Es una grosería que en un país con problemas de inflación el deporte del pueblo se haya vuelto accesible solo para los que tienen dinero de sobra y también es grosero que se permita la reventa legal que infla los precios a números que rayan en lo absurdo.
Hablando del tema, nuestro compañero Jacobo Strimling hizo la misma pregunta, de los precios impagables, refiriéndose al partido del Soccer Champions Tour entre el Real Madrid y el Chelsea, este último ya ha venido por estos lugares a presumir a sus novatos y meter a sus estrellas en los últimos 20 minutos. Son partidos amistosos de preparación para la temporada disfrazados de torneo, pero en general entretenidos. El mismo asiento de arriba, para este partido, cuesta $89, y el de abajo, $182. Precios caros, pero no tan violentos, pero recordemos que estamos viendo una cascarita entre millonarios y nada más. ¿lo vale?
No sé ni para que hago la pregunta, si lo vale o no es de cero relevancia o importancia, somos fanáticos, queremos vivir el fut, hacer la ola, festejar el gol, sufrir en la ca….ncha! Y vamos a pagar lo que podamos y hasta nos endeudamos, pero nadie nos quita lo bailado.
Una vez engañados, embrutecidos, y consientes de que somos esclavos de esa multinacional enorme llamada FIFA y de los corporativos deportivos más grandes del mundo, valuados en billones de dólares principalmente por que llenan estadios como el Bank of America, dejen les doy la opción que creo mejorcita… El partido por el tercer lugar de la Copa America. Un duelo sin importancia más que el triste consuelo de quedar en tercer lugar. Los precios siguen violentos, pero no mortales, los mismos dos asientos están en $135 y $208 y todavía la reventa no se ha comido todos los boletos. Es un sábado, por lo que se puede armar la fiesta en grande, y si se da alguna sorpresa quien sabe si Estados Unidos, México, o tal vez la misma Argentina o la Verdeamarela, acaben jugando. Si de lo que se trata es de la experiencia, esta podría ser la mejor. Digo, también puede ser Paraguay vs. Jamaica, pero en ese caso pueden revender su boleto, de todos modos ya son otro engrane de la maquinaria.
Por Hernán Mena
hernanmena@lagambetasportscarolinas.com