
Por Hernán Mena
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Y no precisamente por una troca de la Ford, pero más o menos así se sintieron los de Carolina dentro del Ford Field donde cuando se dieron cuenta, después de una doble reversible para anotación, ya iban abajo 28-7, el liniero novato Chandler Zavala ya estaba en el hospital donde el último reporte es que ya está moviendo todas las extremidades y recuperándose lentamente, pero dudo lo veamos por varios meses. Por el lado de los Leones Jarred Goff había lanzado 3 pases de anotación mientras que al “Chaparrito” Young la defensiva rival lo había interceptado 2 veces. El marcador final fue 42-24 pero la mayoría de los puntos de las Panteras llegaron cuando el partido estaba decidido.
La defensiva hizo lo que pudo, pero Detroit tuvo ventaja y cancha corta todo el partido debido a los problemas de la ofensiva que tristemente oscurecen los momentos brillantes de la única unidad que medio funciona en Carolina, como el momento en que detuvieron a Detroit en cuarta y uno. Para ellos fue otra semana con más de lo mismo y muchos minutos en la cancha que terminan cansando a cualquiera. ¿Y ahora qué? El hospital de las Panteras crece y tienen el dudoso mérito, luego de la victoria de los Osos el jueves, de ser el único equipo que no ha ganado esta temporada en la NFL, la moral está por los suelos… lo mejor serían unas vacaciones en el sol de Miami, pero para su mala fortuna, las Panteras estarán allá el próximo domingo, pero en plan de trabajo.