
hernanmena@lagambetasportscarolinas.com
Comentaba hace unos días que tenía esperanza en que esta Serie Mundial fuera de calidad y, hasta el momento, no me han decepcionado.
Luego de dos partidos en Houston tenemos la serie empatada a uno por bando luego de que en los primeros innings del juego 1, entre 2 jonrones de Kyle Tucker y picheo dominante de Verlander parecía que los locales iban a caminar a la victoria, pero como dije anteriormente los Phillies tienen estrella y de pronto el picheo de relevo de los Astros hizo agua, y el de los visitantes aguantó, mandando el juego a extra innings y luego… se acuerdan del bate caliente del cátcher Realmuto que mencioné en el artículo pasado? Cuadrangular en el décimo y tan tan. 6-5 Phillies.
El estadio quedo callado, las luces se apagaron, pero el legendario manager Dusty Baker movió sus fichas, sobre todo en el picheo de relevo, y espero con paciencia a que uno de sus bateadores estelares se prendiera, como le pasa a los buenos toleteros que son de rachas, como le pasó anoche a José Altuve cuyo doble en la primera entrada comenzó una fiesta de tres carreras, en la quinta Bregman empujó dos con un jonrón, gran picheo del dominicano Valdez y así como si nada los Astros estaban 5-0…igual que el viernes, cuando perdieron toda su ventaja.
Tristemente el beisbol es de supersticiones, una vez con el marcador cómodo, los bates se enfriaron, el picheo comenzó a cansarse, los Phillies metieron una y luego de un susto doble cuando Schwarber bateó un foul que estuvo a centímetros de ser jonrón y en el mismo turno fue puesto out con un batazo pegado a la barda que hubiera puesto las cosas 5-3… y si ese mismo batazo hubiera sucedido en Filadelfia un fanático hubiera robado la bola antes que la cachara el jardinero y hubiera sido jonrón. Pero él hubiera no existe, los Astros (los de Houston y los de arriba) se alinearon y al final empataron la serie llevándose el segundo. Ahora vienen 3 juegos en Filadelfia este lunes, martes y miércoles y casi es seguro al menos un juego en Houston el viernes porque dudo que estos equipos, tan distintos y tan parejos a la vez, puedan dejar al otro ganar tres seguidos, así que nos queda una semana más para disfrutar el mejor beisbol del mundo.